Los celos se producen cuando nos sentimos en desventaja, real o imaginaria, y se inician en un momento de necesidad afectiva. Se describen de diversas maneras: como frustración de amor, como rivalidad fraterna, como envidia entre hermanos, como ambivalencia afectiva y, sobre todo, como un conflicto afectivo propio de las edades egocéntricas. En realidad, el sentimiento de celos es el miedo de perder el afecto del otro y representa un conflicto; es la interferencia de un tercero en una relación. Ortigosa (2002) define los celos como una reacción adaptativa infantil transitoria, causada p…
Contenido solo disponible para suscriptores
Accede a este artículo individual por solo
14754.36$ IVA incluido
Descubre todo nuestro contenido sin límites
¿Ya tienes cuenta? Inicia sesión