Necesidad de la norma
he rompido, me se, he roto, se me, autoritas
En realidad, la normativa lingüística no es más que un hecho propio de la actuación social de los individuos porque, como señala Ángel Rosenblat (1967; 1994, p.105), “los usos lingüísticos, como todo comportamiento social, responden siempre a una norma, estricta en unos casos, flexible en otros”. Algo que según Coseriu (1993, p. 162) es esencial a las actividades libres, que “son actividades que contienen su deber ser, que contienen sus normas como normas intrínsecas, como normas, precisamente, libremente consentida…