La formación del profesorado

La formación del profesorado en lengua y literatura en Latinoamérica ha oscilado entre dos grandes tendencias: la formación desde la tecnología educativa, en la que predomina lantención de "enseñar a enseñar" la lengua como sistema, y la formación desde la pedagogía de proyectos, cuyo propósito fundamental es el de acentuar la dimensiónnvestigadora y el dominio del campo disciplinario (las ciencias del lenguaje). La segunda tendencia es muy reciente y hado ganando terreno a partir de las reformas curricularesnscritas en las reformas educativas de cada país. Mientras que la primera tendencia se basa en un enfoque gramaticalista, la segundanvoca el enfoque comunicativo y el énfasis en la adquisición de competencias, con el soporte de las teoríasnterdisciplinarias del texto y de la semiótica del discurso. Para la materialización de esta segunda tendencia, se ha apelado a lanvestigación-acción, tanto en la formaciónnicial como en la formación permanente.

Reflexionar sobre la formación continua de los docentes obliga a pensar en un problema más amplio del cual ésta forma parte: el de la producción y la comunicación del conocimiento didáctico. Es por eso que los estrechos lazos existentes entre lanvestigación didáctica, el diseño curricular y la capacitación constituyen el "tema mayor" en el cual se enmarca la cuestión específica que enfocaré en este artículo: la elaboración -en los encuentros con los docentes- de conceptualizaciones sobre la enseñanza y el aprendizaje de la lectura y de la escritura a partir del análisis de registros de clase, así como de otros materiales vinculados al quehacer en el aula.

¿Quéndicadores podemos considerar evidencias de avance de los sujetos en un proceso de aprendizaje? ¿Y cuando es un proceso formativo en el cual ese sujeto es un maestro y se trata de la didáctica de la lectura y de la escritura? En este artículo se considera la posibilidad de utilizar las propias preguntas de los docentes como datos de su avance en el proceso de aprendizaje.

La formaciónncial del profesorado de lengua y literatura no es la más adecuada para la profesión docente; un problema central de la enseñanza, como es la coordinación de los objetivos y contenidos de uso y los conocimientos sobre la lengua, tiene que ver con ello. El profesorado necesita una visiónnterdisciplinar de su materia y, más en concreto, de los procesos de adquisición, comprensión y expresión, así como de la relación entre estos procesos y la actividad metalingüística, para lo que se realizan algunas propuestas.

El autor de este artículo presenta lanvestigación-acción como un medio útil de que disponen los profesores de lengua para reflexionar sobre su tarea pedagógica y, de esta manera, mejorarla. Leo van Lier defiende un tipo denvestigación quenvolucre a los propios autores, los profesores, y propone una serie de estadios que hay que tener en consideración a la hora de llevar a cabo este tipo denvestigación en el aula.

A nadie como al estudiante le urge aprender a definir. Desde quengresa en la escuela hasta que culmina su carrera universitaria, cuenta los días por el número de definiciones que ha de comprender, memorizar y reproducir. Por otra parte, y desde un punto de vista más general, definir es una manera de avanzar en el conocimiento de la realidad, mediante el análisis y la catalogación de la misma, y un modo de cualificar la manifestación de ese conocimiento, encluso de facilitar su recepción. Todo ello justificancluir la enseñanza de la definición entre los contenidos escolares. Seguramente, dentro del área de lengua, aunque con vocación de trascender sus límites y, como la mayor parte de los aprendizajes lingüísticos y comunicativos, prolongarse hacia las demás áreas, ya que esnstrumento de trabajo en todas. Se ofrece aquí una propuesta didáctica sobre la definición bajo la forma o patrón de lección escolar "tradicional": primero unos conceptos y principios básicos (expresados de forma muy sencilla) y luego unas actividades (a las que acompañan algunas observaciones "de procedimiento").

El artículo describe de manera sintetizada unanvestigación educativa realizada en el segundo ciclo de la educación secundaria obligatoria. Presenta una programación del vocabulario básico mediante dos estrategias: una de carácter tradicional y otra dendolennovadora. Realizado el estudio empírico del proceso de enseñanza-aprendizaje del vocabulario, se extraen conclusiones y se propone un nuevo modelo dentervención didáctica.

La lectura se enfoca generalmente como una actividad. Sin embargo, se trata de un contenidomportantísimo necesitado de una programación autónoma que le dedique cuando menos una unidad didáctica en cada curso de educación secundaria obligatoria. El enfoque de esta unidad depende del objetivo seleccionado, que determina los demás factores. Frecuentemente, los enfoques de la lectura comienzan erróneamente por una discusión de las actividades (qué leer) y no por los objetivos (para qué leer). En particular, para articular una unidad didáctica sobre el hábito lector fácilmente compatible con otras unidades, conviene seguir unos principios como los de autonomía, homología, simplicidad, obligatoriedad, modelización, orientación, opcionalidad y cantidad.